"He ardido mil veces en tus brasas,
he bebido de ti hasta secar tus labios,
te he poseido hasta gastar mi Alma..."
Cuantas veces he conquistado tu Reyno.
Cuantas veces te has anudado a mi cuerpo.
Cuantas veces te has perdido y has vuelto de nuevo.
Cuantas veces hemos jugado con el Deseo.
Dormida. Desnuda.
En la mayor de las quietudes, en el mayor de los Silencios.
A solas. Sin romper la levedad de tu sueño. Te contemplo.
Quieto. Desnudo.
Siento tu frangancia. La tibieza de tu carne. Te Deseo.
Acariciándote. Sintiendo la fuerza y el fuego de tu Cuerpo.